Se está construyendo una red de saneamiento en la calle Urune del polígono industrial Sagasti, que estará lista para finales de noviembre
El Ayuntamiento ha comenzado a construir una red de saneamiento en la calle Urune del polígono industrial Sagasti. La red evitará los vertidos que varias empresas de la zona venían realizado a la regata Bakarraiztegi.
Para ello, el Ayuntamiento de Lezo cuenta con dos subvenciones por parte de la Diputación Foral de Gipuzkoa. La primera de ellas, de 37.305 euros, concedida para el desarrollo de acciones del Plan de Acción de la Agenda 21 Local. La segunda, de 87.676 euros, dentro del programa de apoyo a los ayuntamientos de Gipuzkoa con el objeto de impulsar inversiones locales para dinamizar economías locales. En total, 120.988 euros.
Los trabajos de saneamiento comenzaron la primera semana de octubre, y si no hay contratiempo alguno, está previsto que concluyan para finales de noviembre. Una vez construida la red de saneamiento, las empresas que vienen realizando vertidos deberán conectarse a dicha red. Los gastos derivados correrán a cargo de esas empresas, que superan la veintena.
El Ayuntamiento mantuvo una reunión con todas ellas en el mes de julio. En la misma informó de los trabajos a realizar, ofreciéndoles ayuda logística para facilitarles la conexión a la red.
Vertidos desde 2010
Eguzki Talde Ekologista dio cuenta de estos vertidos en el año 2010 e interpuso una denuncia contra el Ayuntamiento de Lezo y la Fiscalía de Medio Ambiente. Las obras de saneamiento que se están llevando a cabo son fruto de esa denuncia.
Desde entonces, el Ayuntamiento de Lezo, la Fiscalía de Medio Ambiente y la Agencia Vasca del Agua vienen trabajando con la intención de paralizar los vertidos. Tras las primeras investigaciones, se pensó que era una sola empresa la responsable de los mismos. Se habló con sus responsables, y tras solucionar el problema, los vertidos continuaban. Ante esta situación, se retomaron las investigaciones y se encontró la raíz del problema: la calle Urune no contaba con una red de saneamiento, y por consiguiente, los vertidos de las empresas llegaban hasta la regata.
Durante estos cuatro años, el Ayuntamiento ha buscado financiación para acometer las obras, ya que se trata de unos trabajos muy costosos. Ahora, con las obras en marcha, desde el ayuntamiento esperan dar carpetazo al tema de los vertidos una vez finalizadas las mismas.
