Dicha modificación contempla la edificación de una nueva promoción privada de viviendas en el nº4 de la calle San Juan, junto a las oficinas de cultura.
Asimismo, el pleno municipal ha tratado temas como la aprobación del informe de viabilidad económico-financiera de la gestión del polideportivo o el incremento retributivo de las y los trabajadores municipales para el 2021 así como dos mociones.
La corporación municipal de Lezo celebraba ayer su primer pleno ordinario del año 2021 en el que destacó, entre otros temas, la aprobación definitiva de la primera modificación del Plan Especial de Rehabilitación del Casco Histórico de Lezo.
Dicha modificación contempla, a futuro, una nueva edificación privada de viviendas en el nº4 de la calle San Juan, concretamente en el edificio que se encuentra junto a las oficinas municipales de cultura, demoliendo el actual bloque, que se encuentra vacío y en malas condiciones y construyendo ahí uno nuevo. El dictamen para llevar a cabo la citada modificación y por consiguiente, en un futuro, la nueva edificación fue aprobado por unanimidad.
Junto con dicho dictamen también se aprobó el relativo al informe de análisis económico-financiero de la gestión integral del polideportivo. Y es que, finalizada la vigencia del actual contrato, el equipo de gobierno municipal quiere iniciar el proceso y expediente de contratación para la gestión de dicha instalación. No obstante, la actual ley de Contratos del Sector Público exige la realización y aprobación de un estudio previo de viabilidad de los servicios. De este modo, en el pleno celebrado ayer la corporación municipal aprobó, con los votos a favor de EAJ-PNV y el voto de calidad del alcalde, dicho informe que abre las vías para sacar a licitación el servicio y renovar así el actual contrato. EH Bildu votó en contra.
Por último, también se aprobó, también por unanimidad el incremento retributivo del 0,9% para las y los trabajadores municipales en el año 2021, incremento que viene dictaminado por los Presupuestos Generales del Estado.
En el apartado de mociones, EH Bildu presentó una para solicitar al Gobierno Vasco un fondo extraordinario para los Ayuntamientos, entre otros, para hacer frente a las pérdidas ocasionadas en los servicios municipales, a los gastos derivados de la adaptación al teletrabajo o para responder a las situaciones de emergencia de la ciudadanía. EAJ-PNV, por su parte, contra argumentó que “la base del sistema de financiación entre instituciones vascas es una responsabilidad compartida y que del mismo modo en que el Gobierno Vasco y las Diputaciones Forales han asumido gastos adicionales como consecuencia de la crisis sanitaria, en virtud de esa responsabilidad compartida, está fuera de lugar por parte del Ayuntamiento, asumir gastos de sus propias competencias y solicitar después la devolución de ese dinero para poder sufragarlos”. La moción, por tanto, no fue aprobada.
En segundo lugar, EH Bildu presentó otra moción relativa a la defensa del Sistema Vasco de Servicios Sociales como red pública de atención organizada, moción a la cual EAJ-PNV presentó otra alternativa cuya finalidad no es otra que mostrar su postura a favor de instaurar el principio de subsidiariedad en las políticas públicas, defender un avance en el modelo de cuidados de larga duración de las personas mayores, incidir en su apuesta por unos servicios sociales vascos de calidad y reclamar un debate razonable y acuerdos de nación para adaptase a las nuevas necesidades de atención que ha impuesto la Covid-19, dejando a un lado la demagogia y los excesos. Esta última fue la que salió adelante.